Apenas hace 48 horas que llegué a Buenos Aires, cada vez más cercana, más familiar.
¡Mi cita anual con el Seminario Internacional de Aprendizaje-Servicio!
Un trabajo agradable, esto de cruzar el Atlántico para pescar experiencias y testimonios vibrantes de aprendizaje-servicio como los que hemos visitado esta mañana.
Se trata del Programa integral de acción comunitaria en barrios vulnerables de la UBA, la Universidad de Buenos Aires.
En concreto, hemos visitado las acciones desarrolladas en el centro de primera infancia La Tortuga Manuelita, gestionado por la Asociación de Madres Cildáñez.
En este centro hemos visto cómo estudiantes universitarios de diferentes especialidades sanitarias realizan un seguimiento de salud a 150 párvulos, descongestionando los centros sanitarios barriales, muy saturados.
También hemos visto las actividades de estimulación motriz por parte de estudiantes de educación física y de otras especialidades, así como una formación en microemprendimiento, impartida por estudiantes de economía, para madres que quieren establecerse como costureras.
Hasta hace poco, la participación en el programa por parte de los universitarios era voluntaria. En el momento actual se están incorporando estas prácticas en el currículum académico. Lo bueno ha de ser para que todos lo aprovechen y disfruten.
Sol radiante y temperatura extrañamente primaveral nos ha acompañado todo el día.
Te diría “¡¡¡DISFRUTA!!! Empápate, aprende ¡y cuéntanos!”, pero sería como decirte “respira”. ¡Quién pudiera estar allí! Un abrazo desde un rinconcito del Atlántico.