OkonomiaYo no aprendí prácticamente nada de economía cuando fui a la escuela. Ni en primaria ni en secundaria. Incluso hoy tendría dificultades para explicar según qué conceptos básicos.

Eso sí: me hice un hartón de logaritmos, derivadas y elevar N a la enésima potencia. Y no digo que como gimnasia mental no fuera útil, pero la verdad es que un poco más de matemáticas de la vida real no le hubiera ido nada mal a mi generación.

Por esto me parece genial la iniciativa de Raúl Contreras, Nuria Gonzalez y Cecilia Herráiz, de Nittúa, la plataforma para el cambio social.

Consiste en crear una escuela popular de economía, para aprender a tener el control de nuestra economía, a tener las herramientas para poder tomar decisiones. La crisis económica, que nos ha dejado en estado de shock por lo menos tiene que servir para tomar conciencia de esto.

Los economistas que analizaban las causas crisis nos dijeron muchas veces que “en el fondo, es bastante sencillo” (¡jo, qué rabia!) al lado de “nadie sabe dónde está el dinero” o, incluso peor, “nadie puede saberlo”.

Bueno, pues yo creo que hay que saber cuatro cosas sin que sea necesario ser economista. De la misma manera que hay que saber alimentarse bien sin tener que hacer la carrera de medicina, biología o enfermería.

La idea de crear OKONOMIA, una escuela popular de economía, es brillante por lo sencilla y útil. Hay que apoyarla. Si te parece tan interesante como a mí y quieres colaborar, puedes hacerlo a través de Goteo.

¡También levantaremos nuestro ánimo y nuestra confianza en que juntos podemos cambiar las cosas! Y, de paso, puedes ingresar alguna palabra enferma en el Hospital de las Palabras.

 

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