A propósito de todas las iniciativas, hay una verdad elemental cuya ignorancia mata innumerables ideas y espléndidos planes: en el momento en el que uno se compromete de verdad, la providencia también lo hace.

Toda clase de cosas comienzan a ocurrir para ayudar a esa persona, cosas que sin su previo compromiso jamás habrían ocurrido.

Todo un caudal de sucesos se pone en marcha con aquella decisión ayudándole por medio de incidentes inesperados, encuentros insospechados y ayuda material que nadie hubiera soñado que pudieran ocurrir.

Si sabes que puedes, o crees que puedes, ponte en marcha. La audacia tiene genio, poder y magia. 

Con esta cita de Johann Wolfgang von Goethe cerraba  el zoólogo Jordi Sargatal su conferencia La seducción ambiental y el aprendizaje-servicio, durante la 3a Jornada  de Intercambio de Experiencias de Aprendizaje-Servicio que tuvo lugar ayer en Barcelona.

Jordi nos tuvo una hora hipnotizados y seducidos. Con su relato sobre la gestación del Parque Natural de los Aiguamolls de l’Empordà, nos veíamos acariciando polluelos de cigüeñas, colocando señuelos, parando excavadoras y convenciendo a pescadores y cazadores de que un parque natural es riqueza para todos.

Ciertamente, el compromiso de los niños y adolescentes es poderoso, porque consiguen un gran impacto y arrastran a los adultos con su entusiasmo.

Un testimonio estupendo de ello fue la intervención de Anna y Eva, dos estudiantes de secundaria que nos explicaron su experiencia de construcción de cajas-nido para los  carboneros, en el marco de un Proyecto Europeo Comenius.